Alberto Chicote: «Se ha hecho largo no grabar un programa de tanto éxito como ‘Pesadilla en la cocina'»

Alberto Chicote
Alberto Chicote

Hablamos en exclusiva con Alberto Chicote sobre el estreno de la octava temporada de ‘Pesadilla en la cocina’, que regresa este jueves a La Sexta.

Más de dos años y medio desde que se emitió la última entrega de su séptima temporada, ‘Pesadilla en la cocina‘ regresa este jueves, 24 de noviembre a La Sexta. Lo hace con su octava temporada, que será más ‘Pesadilla’ que nunca con un Alberto Chicote que volverá a enfrentarse a situaciones de tensión máxima.

Este jueves, Alberto Chicote acude al rescate de José Antonio, un cocinero que conoció el éxito y los premios con su antiguo restaurante, ‘Colosseum’; pero que acude al chef acuciado por los problemas de su nuevo negocio: ‘Il Fogón della Toscana’.

Así, ‘Pesadilla en la cocina’ arrancará su nueva temporada viajando a la localidad de Viladecans (Barcelona), en la que se encuentra este restaurante de cocina italiana regentado por una familia gitana. Un negocio que alardea de buena comida, pero cuya mala organización y pésimo servicio han hecho que acumule una deuda que podría obligarle a cerrar definitivamente sus puertas.

Y por eso, en El Televisero, hemos podido hablar en exclusiva con Alberto Chicote sobre la vuelta de ‘Pesadilla en la cocina’ tras casi tres años, sobre qué nos esperan en las nuevas entregas del programa y sobre el reto de volver a presentar las Campanadas con Cristina Pedroche como avanzó El Televisero en exclusiva.

Han pasado casi tres años desde la última temporada de Pesadilla en la cocina’, ¿Cómo has llevado esta espera?

Se ha hecho un poco larga porque no grabar un programa de tanto éxito como ‘Pesadilla’ siempre se hace largo. ‘Pesadilla’ es un programa que te da tanto que al final eres un poco dependiente de ello. Yo tenía muchas ganas de hacerlo pero claro las circunstancias no nos lo permitían. Pero nunca dudé que volveríamos a las grabaciones y sigue siendo tan emocionante grabarlo como siempre.

¿Crees que el hecho de que haya pasado tanto tiempo puede pesar a la hora de que la gente se haya olvidado de ‘Pesadilla en la cocina’?

No, que va. Creo que desde la última emisión de ‘Pesadilla’ no ha habido ni un solo día que no me haya escrito alguien por redes sociales o por la calle preguntando que cuándo vuelve ‘Pesadilla’. Y desde que anunciamos que volvía, no han parado de preguntar que cuándo se estrenaba. Yo estoy recibiendo mucha sensación de estar este jueves al otro lado de la pantalla. Así que yo creo que lo que ha provocado esta imposibilidad de hacer ‘Pesadilla’ es crear una mayor expectación.

¿Cómo defines la octava temporada de ‘Pesadilla’? ¿Qué nos vamos a encontrar?

Vais a ver ‘Pesadilla’ en estado puro. Es ‘Pesadilla en la cocina’ tal y como es. Pero además creo que es una temporada muy diversa y con capítulos muy diferentes entre sí. Hay entregas que son muy emotivas, hay programas que son descacharrantes, otros que son más profesionales. Hay un poco de todo. Y creo que eso va a ayudar mucho a que el espectador disfrute de todos los capítulos.

¿Cuál de todos los casos de esta temporada te impresionó más? ¿Y cuál te costó más sacar adelante?

Ya no tanto porque me impresionase más sino porque es el programa más emotivo que hemos grabado nunca en ‘Pesadilla’ es el caso de un restaurante que se llama El Palomo en Sevilla. Está regentado por dos hermanos muy mayores, que deberían haberse jubilado ya y que están intentando pasar el testigo a una generación que viene con ilusión y con ganas pero que no son capaces de hacerlo. Y yo cuando me encuentro con gente que ha trabajado durante tantísimos años en el oficio sacando su restaurante adelante y que ahora se encuentran en un momento en el que no ven la luz y están completamente apesadumbrados y con nivel de apatía y de impotencia me llega mucho al corazón.

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¿Crees que con el paso del tiempo te has hecho menos duro o al revés?

En absoluto, yo creo que sigo siendo igual que el Chicote del primer día. O al menos yo no he notado ningún cambio. Lo que si cambia es el caso al que te enfrentas. Entonces en un caso como el que digo en el que estás con unos hermanos que tienen 70 años y llevan toda la vida ahí necesitas enfocarlo de una manera diferente. Obviamente el bagaje, la experiencia de los años y el ir conociendo cada vez mejor las situaciones hace que lo puedas afrontar con más justeza, que no justicia. Eso es algo que siempre te ayuda. No es cuestión de ser más o menos duro, porque de hecho este año también se me verá siendo duro en algún capítulo.

Este domingo en ‘La Roca’ hablaste de la situación que vive la hostelería y cómo todo se ha acentuado más tras la pandemia, ¿Cómo lo vives? ¿Y cómo has notado estos cambios en los restaurantes que has visitado?

Es evidente que una vez retomamos ‘Pesadilla’ y que atendemos a restaurantes que han pasado por lo que hemos pasado todos, lo que pasa es que a mucha gente la pandemia le ha hecho cerrar sus negocios. Todos los restaurantes vienen de haber pasado momentos muy duros, pero no ya por la pandemia sino de antes. Y aunque es verdad que la pandemia se ha llevado por delante muchos restaurantes, también ha hecho que otros se hayan creado.

Sin embargo si que ponías el acento en la gente que en los últimos tiempos ha montado bares con las indemnizaciones de despido y como han proliferado negocios de gente inexperta…

Es que el sector de la hostelería ha sido un sector refugio desde hace muchísimos años, no es cosa de ahora. Y si que es verdad que hay mucha gente que piensa que montar un bar o un restaurante pequeño es una cosa muy sencilla y que no hay que tener ningún tipo de conocimiento más allá de que yo hago unas tortillas buenísimas y que las cañas no es tan difícil de tirar pues monto un bar. Y esto no es así.

Es verdad que no construimos aviones y que no requiera de una formación universitaria pero es un negocio que hay que conocer para sacarlo adelante. Y si no lo conoces tienes muchas posibilidades de que se te vaya al traste porque la cosa no es tan sencilla como comprar las patatas a 4 y venderlas a 5. Todo requiere un plan y una estrategia de trabajo. Ninguna manera te garantiza el 100% del éxito, pero partiendo del desconocimiento difícilmente lo vas a sacar adelante. Pero esto es como si a mi me dices que monte una ferretería.

Quitando a Karlos Arguiñano, eres junto a los jueces de ‘MasterChef’ quien más tiempo lleva en televisión, ¿ha habido algún momento que hayas pensado en apartarte de la tele?

Nunca. Sobre todo porque yo he seguido trabajando en mis restaurantes, cocinando y atendiendo a mis clientes cuando no estoy grabando. Yo no dejo de cocinar ni he dejado de cocinar en estos diez años. La tele es evidentemente uno de mis dos fuentes de trabajo y lo disfruto muchísimo. Jamás se me ha pasado por la cabeza dejar la televisión.

Ahora estrenas ‘Pesadilla en la cocina’, ¿en qué punto se encuentra ‘Te lo vas a comer’? ¿Y tienes algún otro proyecto entre manos?

Pues hemos acabado de grabar la quinta temporada de ‘Te lo vas a comer’. La terminamos hace unos días, pero como te puedes imaginar no sé cuándo se emitirá porque es algo en lo que yo no entro. Y bueno proyectos sinceramente lo que más me gustaría es volver a grabar ‘Pesadilla’ de nuevo porque lo grabamos de febrero a mayo de este año. Y yo tengo una confianza absolutamente ciega en ‘Pesadilla’ y estoy convencido de que esta octava temporada va a ser un exitazo como las anteriores y estoy convencidísimo de que el año que viene volveremos a poner en marcha ‘Pesadilla’.

Creo que es uno de esos programas incombustibles que aunque pase el tiempo sigue teniendo muchos adeptos y creo que incluso cada vez va a mejor. Yo personalmente no encuentro ningún motivo para dejarlo de hacer, a mi me gusta, a la cadena le encanta, al público le enamora, pues hagamos más.

«Un año de estos voy a llamar yo antes de que me llamen a mí para decir que quiero dar las Campanadas»

Vuelves a repetir al frente de las Campanadas junto a Cristina Pedroche tras arrasar el año pasado y liderar por primera vez frente a TVE, ¿sentís presión por tener que mejorar cada año? ¿Cómo lo afrontas este año? 

Es mi noveno año ya. Y presión he de decir que siento la misma de cada año. Es decir el compromiso de formar parte de algo absolutamente enorme. Es que la mayoría de gente que está en nuestro país a las 23:45 h. está pendiente del reloj de la Puerta del Sol. Igual no nos están viendo ni a Cristina ni a mi, igual están viendo otra cadena o escuchándolo por la radio, pero tú formas parte de eso. Es el sentirte parte de algo que nos une a todos los españoles y que todos estamos pendientes de eso. Es que por ejemplo hay un partido de fútbol y no todo el mundo lo ve, pero las Campanadas es algo de lo que todo el mundo está pendiente salvo los que les toca trabajar.

Por eso formar parte de algo como esto me parece la hostia, es algo maravilloso. Y para mí cada vez que la cadena me dice ‘Alberto te animas otro año más’, creo que cada año tardo menos en decir que sí. Yo creo que un año de estos voy a llamar yo antes de que me llamen a mí para decir que quiero darlas.

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