El percance por el que Belén Esteban desapareció súbitamente de ‘Sálvame’ sin previo aviso

Según publica en exclusiva Look, Belén Esteban sufrió en directo en ‘Sálvame’ una bajada de azúcar y tuvo que ser atendida por los servicios médicos

Este martes, 25 de enero, Belén Esteban había acudido a su puesto de trabajo en ‘Sálvame’ como cualquier otro día. Sin embargo, a media tarde, la colaboradora salió del plató para no volver a entrar. ¿Cuál fue el motivo de esta inesperada ausencia?

Pues un grave problema de salud. Y es que, según publica Look en exclusiva, fuentes cercanas al programa aseguran que Belén habría sufrido una bajada de azúcar. Motivo por el cual el equipo se vio obligado a llamar a una ambulancia, que, en cuestión de minutos, acudió a atender a la colaboradora.

Afortunadamente, y gracias a la rápida intervención del equipo médico, la de Paracuellos se ha recuperado perfectamente. Aunque prefirió ser precavida y no volver al plató para terminar de recuperarse en su domicilio. Tras el incidente, el programa ha continuado con total normalidad y ninguno de los colaboradores ha querido explicar el motivo de la ausencia de su compañera para no alertar a la audiencia.

Hace diez años estuvo a punto de morir por un bajón de azúcar

No hay que olvidar que Belén Esteban es diabética y no es la primera vez que sufre un episodio de este tipo. El más grave, sin duda, fue hace una década, cuando la colaboradora se debatió entre la vida y la muerte al entrar en coma a consecuencia de un bajón de azúcar.

Ella misma ha recordado en más de una ocasión aquel episodio. «Me dio un bajón de azúcar tremendo. Me quedé sin azúcar en el cuerpo y vi a mi niña como me llamaba, y era muy chiquitita. Lo máximo que he estado en coma han sido 18 días, oía a mis adres hablarme, mi padre me decía que volviera. No quiero hablar porque me acuerdo mucho de mis padres, que lo pasaron muy mal ahí», explicó, muy emocionada, Belén en una entrevista.

La colaboradora lleva conviviendo con la diabetes desde que tenía 10 años. Ahora, convive con una bomba de insulina que le da más libertad y tranquilidad. «Miguel me habló de la bomba de insulina y yo no estaba muy convencida; pero, al final, me la puse y me cambió la vida. Siempre la llevo aquí en el sujetador metida», explicaba con la naturalidad que la caracteriza.