«Te vamos a mutear»: El ultimátum de Emma García a José Antonio Avilés en ‘Viva la vida’

Emma García, harta de la actitud del colaborador, le ha lanzado una clara advertencia.

Este domingo 27 de junio, Emma García ha dicho basta a José Antonio Avilés en ‘Viva la vida’. No es la primera vez que la presentadora le para lo pies, pero, en esta ocasión, le ha lanzado un ultimátum, con el apoyo del programa.

El tono elevado del colaborador hace imposible escuchar las opiniones del resto. Por eso, Emma, harta de decírselo, le ha lanzado una contundente advertencia. En el programa estaban debatiendo sobre la visita de Antonio David Flores al tanatorio de la M-30 para despedir a su amiga Mila Ximénez.

Mientras unos apoyan la decisión del excolaborador de desplazarse de Málaga a Madrid para darle el último adiós a la periodista, otros no entienden que hiciera esto ya que en los últimos meses Mila y él apenas tenían relación. En un momento dado, Avilés aseguró que «le habían contado» que Mila «no estaba de acuerdo con Antonio David» tras la emisión de la docuserie de Rocío Carrasco.

Pero cuando Enrique del Pozo iba a rebatirle, el exsuperviviente ha pegado una parada en el suelo. Una reacción que no ha hecho ninguna gracia a Emma García que no ha dudado en recriminarle su actitud.

La advertencia de Emma García a Avilés: «Te vamos a mutear»

«Avilés, escúchame un momento. Avilés, lo hemos hablado antes de empezar. Vamos a mantener un tono normal. No se te va escuchar más por gritar más. Es más, se te va a escuchar menos», le ha advertido la presentadora, sin que el cordobés le hiciera demasiado caso.

Ante este pasotismo del tertuliano, Emma ha ido más allá: “La siguiente vez, como no tengo ganas de decírtelo más, porque yo no vengo aquí a decirte cómo tienes que hacer las cosas ni soy la profesora, te vamos a ‘mutear’ el micrófono». «¿A qué?», ha preguntado Avilés sin entender a qué se refería. A lo que la presentadora le ha contestado: «A cortártelo. Es mucho más fácil que eso. Tienes muchas cosas que contar, Avilés, y te queremos escuchar, pero sin gritar».

Sin hacerla demasiado caso, el colaborador iba a retomar su discurso. Por eso, la vasca quería asegurarse de que su aviso había hecho efecto: «¿Has entendido bien? ¿O estabas pensando en lo siguiente que ibas a decir?».