«No pudo ser»: María Castro conmueve con su confesión ante el difícil parto de su hija

La actriz María Castro ha contado a través de Instagram todos los detalles del parto de su hija Olivia.

Este jueves 1 de octubre, María Castro daba a luz a su segunda hija, Olivia. Apenas unas horas después, la actriz presentaba a la pequeña a todos sus seguidores de Instagram a través de una tierna foto en la que no puede dejar de mirarla.

Junto a la fotografía, un texto cargado de emoción. «Cuando creías que lo habías experimentado todo, cuando pensabas que no se podía igualar ese amor tan puro… entonces, llegas tú, Olivia, y tiras por tierra todas nuestras teorías y sentimientos. Fue oír tu llano y el amor más animal, puro e incondicional, brotó por sí solo», escribe la actriz.

Ahora, tan solo dos días después del nacimiento, este sábado, María Castro ha querido compartir también a través de Instagram todos los pormenores de su delicado parto, el cual no fue como a ella le hubiera gustado. «Y al final… otra cesárea», comienza escribiendo junto a una fotografía en la que aparece ella poco antes de dar a luz.

«Esta es la última foto en la que monitorizaba y con contracciones, guardaba aún la esperanza de parir por vía vaginal… Me apetecía vivir ese otro tipo de parto… irme a casa sin una operación mayor en el cuerpo… Me apetecía ayudar al bebé a entender que tras el canal del parto, le esperaba el mundo… Pero no pudo ser…», lamenta María, cuya primera hija, Maia, también nació por cesárea.

«Había riesgo de desgarro», desvela la actriz

Y es que, tal y como ella misma explica al no conocer al “100 por 100 el estado de la cicatriz” de su cesárea anterior, impidió el parto natural. Ya que «había riesgo de desgarro, y yo ya soy madre de una que espera en casa, así que no nos la podíamos jugar», explica con total naturalidad.

«No había tiempo y sí muchas ganas», así es que, pese a su enfado por no cumplir su sueño, pero con el apoyo incondicional de su marido, siguió los consejos de los médicos. Por suerte, todo salió a la perfección y ya disfruta de sus dos niñas en casa.

La actriz, siempre con el optimismo por bandera, termina su escrito con un mensaje de fortaleza. «Gallega y dura por naturaleza, tengo salud para soportarlo y una familia maravillosa en quien apoyarme. Ahora, me tocará tomarme la vida con calma…», concluye.

A última hora de la tarde del sábado, María abandonaba el hospital con su pequeña Olvia en brazos y junto a su marido, José Manuel, deseando llegar a casa para abrazar a Maia y presentarla a su nueva hermanita.