Los planes ocultos que Rocío Flores pretende con su participación en ‘Supervivientes 2020’

Rocío Flores es una de las concursantes estelares de la nueva edición de ‘Supervivientes’ y pretende rentabilizar su fichaje de cara a sus planes de futuro.

‘Supervivientes 2020‘ está a punto de comenzar en Mediaset y entre el casting, que poco a poco se va completando, aparece uno de los nombres más soñados el de Rocío Flores. La hija de Antonio David y Rocío Carrasco, que se ha convertido en la revelación de la temporada, ha fichado por el reality de supervivencia.

Y lo cierto es que su caché podría ser el más elevado de la edición: se barajan cifras entre los 15.000 y los 30.000 euros semanales. La realidad es que su intención es sacar rentabilidad a la participación en un formato semejante de cara a su futuro después de la experiencia en los Cayos Cochinos. Algo por lo que incluso ha recibido un consejo contundente por parte de su padre.

Precisamente sobre este futuro, al parecer las intenciones de la nieta de Rocío Jurado son las de abandonar el domicilio familiar. Tal y como avanza Cotilleo.es, su plan principal es el de “comprarse un piso con su novio Manuel cuando salga de Supervivientes“.

Los dos ya “habrían mirado algunos pisos por la capital”. La decisión llegaría evidentemente una vez Rocío regrese a España. Sin embargo, sus intenciones también serían otras a priori, aunque Antonio David se las has tratado de quitar de la cabeza: ayudar a su padre a solventar algunas de sus sonadas deudas.

Todo esto, en medio de la polémica que ha suscitado esa presunta conversación entre Rocío Flores y Rocío Carrasco que desveló Lydia Lozano en ‘Sálvame’ la pasada semana. Pero que sin embargo se trataría de un montaje por parte de la fuente que le facilitó esa falsa información. La protagonista lo negó todo y ahora parece confirmarse que se produjo una suplantación de identidad y que engañaron a la colaboradora.