‘Tu cara me suena 8’: El triunfal regreso de la televisión en estado puro

Analizamos el regreso de Tu cara me suena, el gran buque insignia de Antena 3 que ha estrenado su octava edición.

La tele fue concebida como un medio para entretener de forma sana y respetuosa. Tras más de 50 años el fin de la tele sigue siendo, o debería serlo, el mismo, pero hay formas y formas de llegar a ese objetivo. El de ‘Tu cara me suena‘ es el buen rollo, la música, el humor, y las ganas de pasarlo bien. El concurso de Antena 3 es televisión en estado puro. Y eso se agradece, y mucho.

Tras casi un año después del final de su séptima edición Atresmedia ha estrenado el esperado regreso del programa de imitaciones más popular de la televisión. ‘Tu cara me suena’ está de vuelta; y lo hace por vez primera en el mes de enero tras ceder su habitual estreno en septiembre/octubre a la versión infantil de ‘La Voz’. Un regreso muy esperado tras haber dejado un merecido, y necesario, descanso de 12 meses en el que trabajar un buen casting y crear en los espectadores esa necesidad y ansia de disfrutar de nuevo del programa.

Y ha vuelto como se esperaba: Triunfal. Un maravilloso y excepcional regreso que inauguraba María Villalón, ganadora de la última edición, metiéndose en la piel de Rosalía acompañada de José Corbacho y Anabel Alonso. Las risas forzadas del público, lo único que sobraba.

Luego Manel Fuentes daba la bienvenida al jurado que, formando parte del espectáculo, llegaba al plató vestidos de tripulantes de cabina con un Ángel Llácer haciendo honor a su obra de teatro… «Loca» total.

A continuación el maestro de ceremonias daba a conocer la que es la principal novedad de la edición: Las entrevistas compartidas con todos los participantes antes de su actuación. Un punto muy positivo que podrá permitir los comentarios entre los concursantes antes de sus respectivas actuaciones y crear un clima relajado y distendido entre ellos; elemento que faltaba en las entrevistas individuales del resto de temporadas.

Y tras ello vino la primera actuación. La todopoderosa Cristina Ramos, para muchos desconocida, brillaba como Mónica Naranjo regalando al programa uno de los mejores comienzos de temporada de los últimos años. Un gran espectáculo que auguraba el programa y la edición que nos espera.

Tras ella Los Gemeliers defendieron su actuación de Cruz Cafuné como pudieron; pasando por una maravillosa Nerea como Dusty Springfield y un divertido Monaguillo como Daddy Yankee. Mario Vaquerizo nos regaló risas como la gran Raffaella Carrá, María Isabel lo bordó como Billie Eilish y Belinda Washington hizo una aceptable Madonna. Rocío Madrid dejó mucho que desear como Natalia Jiménez, quizá una de las peores actuaciones de la noche. Pero la palma, sin duda, se la llevó Jorge González y su actuación de Mahmood. El ex participante de ‘OT’ y ‘La Voz’ sorprendió con una gran imitación logrando convertirse en el merecido vencedor de la noche.

Un casting de concursantes sorprendente

En esta octava temporada Gestmusic y Antena 3 han buscado un casting muy potente. No sólo con grandes caras conocidas como Mario Vaquerizo o Belinda Washington, sino con un importante nivel vocal, salvo grandes excepciones, y una gran capacidad imitativa. A los hechos nos referimos tras haber visto grandes actuaciones en el programa uno.

¿Lo único que se echa en falta? Un perfil de concursante al estilo Yolanda Ramos, Silvia Abril, Arturo Valls o Anabel Alonso. Aunque sí hay cómicos auguramos que ese perfil de participante no estará del todo representado.

Un regreso casi blindado de publicidad. Únicamente contamos dos cortes publicitarios de pocos minutos en los últimos 45 minutos del programa. Una estrategia de Antena 3 para atrapar al público el mayor tiempo posible y evitar posibles fugas durante los descansos.

Tu cara me suena volvió, como siempre, sorprendiendo y manteniendo su esencia: el humor, los grandes números musicales, una gran realización y un muy buen rollo y clima que se despierta entre el maravilloso jurado y los participantes. Una tele viva, divertida y sorprendente que busca entretener al espectador de forma sana, ofreciendo una gran alternativa en su ya consolidada noche de los viernes. Tele en estado puro.