José Mota y su «supervivencia» en TVE: «No me defino políticamente porque quiero ser libre»

El humorista José Mota vuelve a ser el gran protagonista de la Nochevieja de TVE con su especial ’31-D: un golpe de Gracia’.

Es junto con Anne Igartiburu uno de los iconos de la Nochevieja de TVE desde tiempos inmemoriales. Lo hizo primero en compañía de Juan Cruz en el dúo Cruz y Raya y después en solitario desde el año 2000 al 2011 de manera ininterrumpida. Tras su fichaje por Mediaset y regreso a TVE, José Mota ha seguido siendo el rostro de la última noche del año desde 2014.

Este 2019 el humorista nos tiene preparado un especial de Nochevieja en el que ha tirado la casa por la ventana y ha reunido a más de 50 cómicos de diferentes generaciones con los que ha querido hacer casi una película de homenaje al humor y a todos sus compañeros.

Lleva 30 años ligado a la cadena pública y en 20 de ellos ha realizado el especial de Fin de Año. Es uno de los rostros que ha permanecido en la cadena pública a pesar de los cambios de Gobierno y sobre eso y el especial de este año charlamos en El Televisero con el propio José Mota.

¿Cómo ha sido cuadrar las cincuenta agendas para que estuvieran todos?

José Mota: No están todos directamente los 50 grabando conmigo, pero si hay algunos que me han enviado alguna adhesión como Wyoming, Eva Hache, Bigote Arrocet…. Son tantos que entre todos suman 50. Me parece que es un milagro y un regalaco el tenerles a todos los compañeros. Yo este año les propuse que quería hacer un golpe porque a la gente de la calle se le ha robado parte de la sonrisa por toda la crispación que hay. Y es entonces cuando los humoristas dan el golpe para recuperar la sonrisa de la gente y de ahí parte todo.

¿Ha costado este especial más que los de otros años?

J.M.: Sí, sin lugar a dudas porque hemos tenido que fabricar el frontal del Congreso de los Diputados y parte de escaños del lado izquierdo. Luego contactar con todos, por ejemplo con Fernando Tejero y que viniera a hacer el golpe. Y tengo que dar gracias a todos porque a todos los que se lo pedí han venido o han grabado algo y han hecho posible que la idea tan loca que tuve se pudiera llevar a cabo.

¿Todos te dijeron que sí?

J.M.: Han venido todos. Y eso es el regalaco que me han hecho.

¿Cómo ha conseguido reunir a Millán Salcedo y Josema Yuste?

J.M. : Tengo una relación muy bonita con Millán y con Josema hace mucho que somos amigos. Escribí un personaje para Millán que se llamaba Millán del Bosch… pero no pudo hacerlo porque estaba recuperándose de lo que le había acontecidoSin embargo, estará con Josema para cerrar el especial conmigo.

¿Pero han trabajado juntos? ¿Comparten plano?

J.M.: Sí, sí. Los dos cierran el especial conmigo.

¿Qué hay de cierto en que teníais rivalidad con Martes y Trece?

J.M.: Yo no lo he tenido jamás. Hubo malos entendidos que Millán y yo hemos aclarado. A día de hoy, es uno de mis mejores amigos. Además de admirarle, le quiero y respeto muchísimo. Y a Josema, igual. Son dos genios del humor y unos referentes. Antes de hacer yo los especiales de Fin de Año, ellos allanaron el camino. 

¿Has pensado en invitar a algún miembro de Casa Real hacer cameos en el especial?

J.M.: No tientes al diablo (risas). No, nunca me lo he planteado pero porque creo que sería imposible pero yo estaría encantado de que viniera alguien.

¿Y a algún político?

J.M.: Acabará pasando, pero todavía no. Las nuevas hornadas de políticos sí han abrazado a la comedia, porque han visto que les permite empatizar con la gente y ser más cercanos a la gente. También el captar a políticos me haría que se retrasara la grabación seguramente porque habría que estar pendiente de las agendas y aunque eso me puede aportar al final las dificultades me restan más que me suman.

¿Ha habido algún político que te haya felicitado por alguna parodia?

J.M.: Sí, Alfredo Pérez Rubalcaba. Y también me llegó de María Teresa Fernández de la Vega, que me llamó para felicitarme por la parodia que había hecho de ella. Me llamó su secretaria cuando estaba en el hospital porque mi padre estaba ingresado y me llamó de un número largo que no suelo coger, pero esa vez lo cogí. Lo primero que pensé es que era una broma de la radio pero al final mira la sorpresa.

¿En el especial de Nochevieja veremos algún político nuevo?

J.M.: Por un momento se verá a Inés Arrimadas, pero muy rápido.

¿Cómo celebras tu la Nochevieja? ¿Te ves en casa con la familia?

J.M.: Hacemos lo que hace todo el mundo: cenar y ve la tele. Estás tan pendiente de la cabeza del langostino como del sketch (risas). Pero es algo que hace todo el mundo, realmente cuando ves el especial es después al día siguiente.

¿Cómo ves a la nueva generación del humor como Broncano o Ignatius?

J.M.: Tienen un talento maravilloso. Vienen a contar nuevas formas de comedia. Ignatius y Broncano tienen mucho talento, hacen humor con una verdad arrolladora. ‘La vida moderna’ tiene mucho mérito y les admiro de verdad. 

Con el momento tan complicado políticamente en el que nos encontramos, ¿crees que puedes recibir muchas críticas por parodiar el 23-F?

J.M.: Realmente no es una parodia, lo que hago es recoger algunos iconos de aquello. El objetivo es quitar hierro a lo que nos agrede y proponer que el humor es un bálsamo para coser heridas y calmar. Humor para recuperar parte del sentido del humor perdido. El humor nos hace libres como ciudadanos y personas.

¿Has presentado algún proyecto semanal a TVE de parodia política al estilo de ‘Polonia’?

J.M.: No, de momento no pero porque estoy en una etapa de mi vida en la que me apetece volcar gran parte de mi tiempo profesional en hacer una peli que haré en abril y en proyectos de ficción que estoy preparando porque es lo que me apetece. De hecho mis últimos especiales de Nochevieja son claramente una ficción con algún sketch del año pero la historia que lo envuelve todo es una ficción.

¿Cuándo comienzas a preparar el especial?

J.M.: En junio me vino la idea. Fue por el hastío personal de no querer hacer más comedia política. Y este año, a pesar de que transcurre en el Congreso, es el que menos parodia política tiene. 

Todos los años suena tu nombre para ‘Tu cara me suena’, ¿pero te han llamado alguna vez para que concurses?

J.M.: Me gustaría, pero tengo proyectos que coinciden en el tiempo y me es imposible. Pero es un formato que me parece muy entretenido. Si tuviera tiempo, participaría.

¿Volverá ‘La hora de José Mota’ en formato semanal a TVE?

J.M.: Ahora me apetece volcar mi tiempo en la ficción y el cine. Eso no quita que pueda surgir algo. Pero tenéis que entender que llevo muchos años haciendo programas semanales y me apetece hacer otras cosas. 

Eres junto a Ana Blanco y Anne Igartiburu uno de los únicos profesionales que resisten en TVE ante los cambios de Gobierno, presidentes de RTVE… ¿Cómo lo consigues?

J,M.: Muy sencillo: yo he entendido que el humor vuela por encima de los ideales políticos. He tenido la suerte de vivir de mi trabajo. No me han pedido favores ni yo se los he pedido a ningún político. A veces me dicen que no me defino políticamente, pero es que no quiero, porque me apetece ser libre y opinar lo que considere oportuno. Y si mañana hago un juicio de valor sobre un partido, que no tenga ningún prejuicio…  Además, creo que se puede hacer crítica política y social sin hacer sangre. Tan importante es el ‘qué’ como el ‘cómo’.

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