El Maestro Joao lee los pezones de Sofía y Alejandro Albalá en ‘Supervivientes 2018’

Sube la temperatura en Supervivientes en el cuerpo a cuerpo entre Sofía y Alejandro Albalá. El maestro Joao, en su intento por reconciliar a la pareja, los animó a que juntaran sus pezones para medir el grado de compatibilidad y saltaron chispas.

El acercamiento entre Sofía y Alejandro Albalá, que a punto está de cumplir su estancia como fantasma del futuro, se ha acelerado bastante y en ello tiene mucho que ver el vidente. Ahora ha pasado de leer traseros a todo aquel que pisaba las playas hondureñas a poner el foco en la expareja para que limen asperezas. La última modalidad que se ha sacado de la chistera ha sido juntar pecho con pecho para comprobar el grado de compatibilidad y para trazar el futuro que tienen por delante los tortolitos que ahora están enzurronados en un amor-odio constante.

Para este reto, que contó con Raquel Mosquera como testigo omnisciente, Sofía, ante la insistencia de Joao, se vio obligada a quedarse en topless a tan solo dos centímetros de un Alejandro al que le tuvieron que subir los colores. Nada más juntarse, el maestro exclamó que les auguraba un futuro eterno y que “van a volver a ser pareja muy rápido porque los dos son muy pasionales”; lo que provocó que la pamplonesa rebosara de felicidad y se lanzara a darle un apretado abrazo a su todavía expareja y, claro, con ese “pechito a pechito” la temperatura no hizo más que dispararse en los Cayos Cochinos.

Sin embargo, el “pezonamiento”, así lo bautizó el maestro de ceremonias, no convenció del todo a un Albalá aséptico y poco receptivo. Aunque quizás solo sea un guiño a su orgullo y en realidad esté derretido por dentro. Así las cosas, la reconciliación definitiva tiene que estar al caer entonces, porque, si Joao no se equivoca, Sofia está cerca de un acontecimiento muy especial. Y no es otro que ¡vestirse de blanco en menos de un año!. No sabemos si será con Alejandro bajo el brazo o con… Logan. El futuro lo dirá.