La crítica de la semana | Noches para la ira

ANÁLISIS DE AUDIENCIAS | Semana del 13 al 19 de febrero de 2017
 

La semana televisiva que dejamos atrás no dejó indiferente a nadie. Las pasiones más intrínsecas de los espectadores despertaron frente al televisor con una retahíla de formatos con altas dosis de controversia.

Lo sé, la resaca de ‘Objetivo Eurovisión’ ya está más que superada, pero uno no quiere morirse sin comentar la mejor gala televisiva del siglo XXI. No se veía nada tan delirante desde ‘Hotel Glam’, una sucesión de despropósitos marcaron el ritmo de una noche para el recuerdo. La lista de genialidades es infinita pero quien se llevó la palma son las dos muchachas encargadas de transmitir el murmullo de las redes durante el gala. Estas musas del periodismo fueron capaces de ofrecernos una entrevista a Nieves Álvarez, con la parsimonia que la caracteriza y sin tener ni idea del festival, o una performance de unos youtubers que deben conocer en su casa, pero en la mía no. Más allá del sinsentido que derrochaban dichas conexiones la gala tuvo mucho más arte: cámaras cruzándose entre actuaciones, planos aéreos que duran 20 segundos, bengalas de los chinos o la aparición estelar de Karina en el escenario interpretando una de sus canciones (entera!). Lamento profundamente que ‘Objetivo Eutovisión’ solo fuera visto por un escueto 8,9% de share y que ya nadie recuerde todos estos detalles de calidad que nos ofreció la televisión pública, únicamente se sigue hablando del supuesto amaño en la elección del representante español. Sobre toda esta polémica solo apuntar que hay un filón por explotar: un miembro del jurado encantado de conocerse, una tal Toñi Prieto con aires de pérfida malvada y unos talibanes entre el público con menos compostura que los hooligans ingleses. Una pena que no sea Telecinco la encargada de gestionar todo este desaguisado….
La ira aterrizó en las noches de Antena 3 de la mano del talent culinario con más cuchillos por la espalda por metro cuadrado. El miércoles llegó a nuestras pantallas la nueva edición de ‘Top Chef’, y ya van cuatro. El concurso de cocina se estrenó con un tibio 14,7% de share pero plantó cara a Bertín Osborne que tuvo que conformarse con un 15%. No hubo sorpresas, Chicote volvió con la fórmula habitual, mala leche y concursantes con exceso de divismo. La diferencia entre el concurso de Antena 3 y ‘Masterchef’ salta a la vista, mientras la cadena privada se regodea en la tensión y en la competitividad entre cocineros, la cadena pública juega con el costumbrismo español recreando un capítulo de ‘El Chiringuito de Pepe. En ‘Top Chef’ no hace falta edulcorar la competición con chascarrillos infantiles o promocionar las bondades de la geografía española, es un campamento militar capitaneado por Alberto Chicote que entiende mucho más de televisión que la mayoría de concursantes de la actual edición de ‘GH VIP’.
El jueves se estrenaba en Cuatro uno de los formatos con mejor factura de la temporada televisiva. ‘Ramón Laso: sinónimo de muerte’ no contó con mucho apoyo por parte de la audiencia en su estreno y tuvo que conformarse con un discreto 5,7% de share, una pena. No era tarea fácil recrear las particularidades de un caso tan escabroso sin regodearse en el morbo, pero el nuevo programa de Cuatro cumplió con creces su cometido. Buena factura con influencias evidentes de ‘La isla mínima’, recreación cuidada de los hechos acontecidos y rigor en la estructura narrativa. Acostumbrados como estamos a los yonquis del morbo de los programas matinales, la puesta en escena del reportaje emitido en Cuatro nos trasladó a otro enfoque diametralmente opuesto, buen gusto para abordar los sucesos sin perder un ápice de verdad en la historia. Lamentablemente, el nuevo espacio de recreaciones criminales se vio engullido por la temible competencia de los jueves por la noche, en la que ‘Gran Hermano Vip’ (17,9%) y Cuéntame’ (17,3%) se repartieron el pastel.

Sigue toda la información de El Televisero desde Facebook, X o Instagram

Más Información

Un soltero de ‘First Dates’ tira de la manta y desvela lo que paga el programa por una cita
Francisco Bernad y Alberto Chicote en 'Batalla de restaurantes'.