La crítica de la semana | Perdidos en el tiempo

ANÁLISIS DE AUDIENCIAS | Semana del 17 al 23 de octubre de 2016

El paso del tiempo es el juez más implacable para dictar sentencia sobre los formatos y las criaturas televisivas. Muchos se quedaron por el camino y otros nunca abandonaron nuestro recuerdo, los años pasaron y la criba de la audiencia marcó sus trayectorias.

Este año estuvo marcado por la moda de los reencuentros televisivos, series y programas de antaño pretendieron dotar de cierta expectativa a reuniones muchas veces innecesarias que no interesaron más que a sus propios protagonistas, o acaso ¿alguien en su casa estaba esperando la reunión de los protagonistas de ‘El Barco’? . No es el caso de ‘OT El Reencuentro’, anhelado desde el día en que se anunció su vuelta y con unos datos de audiencia en su estreno que no dejaron margen a la duda sobre la idoneidad de su come back: casi 5 millones de espectadores y un demoledor 24,8% de share. No era tarea fácil reconstruir este caramelo envenenado, la nostalgia muchas veces nos hace mitificar los buenos recuerdos del pasado y al mínimo traspiés podíamos defenestrar el programa, pero el resultado fue satisfactorio para todos los paladares. El reencuentro es un abanico de emociones bien entrelazadas, sin caer en la autocomplacencia de los grandes éxitos vividos y mostrando las dos caras de la moneda sin miedo a apuntar a las altas esferas. El testimonio de Rosa cero en azúcar, el peso de la fama en el endiosamiento inicial de Bisbal, el juego en la interpretación de los gestos de Chenoa…; píldoras de entretenimiento acompañadas de músicas envolventes, agilidad en la narrativa y capacidad para movernos por el espacio temporal sin perdernos en el tiempo.
Lo peor de ‘OT El Reencuentro’ fue su capacidad para eclipsar el estreno de ‘Astral’ en LaSexta que se tuvo que conformar con un notable 14% de share. Su visionado era del todo necesario y los programadores decidieron hacer coincidir dos de los eventos televisivos más importantes del año la misma noche, cuando han tenido días de sobras para hacerlo y no deleitarnos cada domingo con cine americano infumable o ataques de trascendencia de Ana Pastor. Más allá de este recuerdo dominical, las series más longevas de la televisión actual siguieron mostrando esta semana su capacidad para atraer a la audiencia a pesar del paso del tiempo. ‘La que se avecina’ sigue siendo la serie más vista de la temporada aunque este martes bajara hasta un 21,4% de share. A pesar de que la comedia se cambiara de cadena, se perdiera por el camino y volviera en una comunidad diferente siguió conservando su esencia: un humor desacomplejado sobre algo tan básico y cotidiano como las relaciones vecinales. 
Mantenerse en lo alto es tarea casi imposible y volver en según qué condiciones no siempre es necesario. Raquel Mosquera es de esos personajes del papel cuché que hemos visto siempre en las portadas de las revistas de casa de nuestras abuelas o que hemos ojeado con miedo a ser vistos en las peluquerías de señoras (las “pelus modernas” se piensan que preferimos leer sobre diseño y nosotros escenificamos a la perfección el papel de interesados). La peluquera regresaba este viernes a ‘Sálvame Deluxe’ tras estar ingresada recientemente por problemas psiquiátricos. El programa necesitaba un plato fuerte para frenar a ‘Tu cara me suena’ y el resultado no fue el esperado, pese al esfuerzo de la Mosquera el programa se conformó con un 16,3 de share frente al excelente 23,2% del show de Manel Fuentes. Probablemente no era el momento para que volviera, su estado emocional destilaba ciertas alteraciones: acelerada en el habla y exasperantemente repetitiva. Es evidente que nadie la obligó a sentarse en el Deluxe pero la necesidad de tener un testimonio potente hizo correr demasiado los tentáculos de la cadena para seducirla.

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